La aprobación de un ambicioso proyecto de 25 millones de euros permitirá a Costa Rica invertir significativamente en el desarrollo de hidrógeno verde como una estrategia complementaria para descarbonizar su economía.
El proyecto “Hidrógeno Verde para una Economía Descarbonizada” está diseñado para aprovechar esta energía limpia como una alternativa viable para sectores difícilmente electrificables, como la industria del cemento y el transporte de carga pesada.
El proyecto consta de dos componentes principales: asistencia financiera y asistencia técnica. La asistencia financiera apoyará las inversiones iniciales en proyectos de hidrógeno verde a través de préstamos concesionales y subsidios, abordando los altos costos iniciales asociados con este sector emergente. La asistencia técnica se enfocará en desarrollar capacidades humanas e institucionales, revisar el marco legal y regulatorio según sea necesario, y crear estrategias para generar impactos sociales positivos, incluyendo la creación de empleo.
“Nuestro objetivo es apoyar al gobierno costarricense en la implementación de la Estrategia Nacional de Hidrógeno Verde”, dijo Claus Kruse, gerente de proyecto interino de la Cooperación Alemana GIZ.
A mediano plazo, podrían establecerse hubs de hidrógeno en todo el país, consolidando no solo la producción de hidrógeno verde sino también su aplicación en transporte, proyectos industriales y áreas relacionadas como la formación técnica y profesional, la certificación, la investigación y más.
“Este es un modelo único que ofrece un apoyo significativo a Costa Rica. Proporciona una oportunidad para desarrollar la capacidad tanto del sector privado como del público, junto con la orientación del Estado, para explorar un nuevo dominio energético. El objetivo es equipar a las nuevas generaciones con el conocimiento y las herramientas para combatir el cambio climático”, dijo el ViceMinistro de Energía de Costa Rica, Ronny Rodríguez.
En mayo de 2021, la Cooperación Alemana para el Desarrollo GIZ presentó una propuesta en nombre del gobierno costarricense al MAF (antes NAMA) para competir por fondos para desarrollar un proyecto de hidrógeno verde en el país.
En octubre del mismo año, durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático en Glasgow (COP26), se anunció que la propuesta de Costa Rica había sido seleccionada, convirtiéndola en la única elegida de América Latina y la primera de su tipo en la historia. El proyecto comenzó oficialmente el 1 de septiembre, con la Cooperación Alemana para el Desarrollo GIZ liderando su implementación.
