La prohibición mundial de la caza de ballenas se mantiene inalterada después de la reunión de la CBI

Global Whaling Ban Stays in Place After IWC Meeting

Una moratoria de cuatro décadas sobre la caza comercial de ballenas seguirá en vigor después de que se retirara una propuesta para revertirla el jueves en una reunión de la Comisión Ballenera Internacional (IWC) en la capital peruana, Lima. Otra propuesta para declarar la caza de ballenas como una fuente de seguridad alimentaria global también fue abandonada en una sesión plenaria al no lograr consenso entre los delegados de 60 países.

“Estamos aliviados de que se haya retirado la oscura y peligrosa resolución para reanudar la caza comercial de ballenas”, dijo Grettel Delgadillo, representante de América Latina para Humane Society International (HSI). La primera propuesta fue presentada por Antigua y Barbuda, que no es una nación ballenera pero ha dicho que seguirá el tema en la próxima reunión de la CBI en Australia en 2026.

Delgadillo mencionó que las posturas a favor de la caza de ballenas por parte de países que no consumen carne de ballena “demuestran cómo Japón sigue influenciando a la CBI a pesar de no ser miembro”. A su vez, la propuesta de seguridad alimentaria fue presentada por un grupo de países africanos que tampoco tienen tradición ballenera pero son aliados de Japón, según ONG.

Japón es uno de los tres países que continúa la caza de ballenas, junto con Noruega e Islandia. Continuó la práctica con fines “científicos” después de que se introdujera la moratoria en 1986, matando a cientos de ballenas en el Antártico y el Pacífico Norte.

Después de años de tensiones que dañaron su reputación internacional, Japón abandonó la CBI en 2019 y reanudó la caza comercial de ballenas dentro de sus aguas territoriales y zona económica exclusiva (ZEE). Se estima que los cazadores matan unas 1,200 ballenas cada año.

El cambio climático es otra amenaza para las criaturas, con la disminución del 20 por ciento en el número de ballenas en el Pacífico Norte entre 2012 y 2021 debido a la escasez de su principal fuente de alimento, el plancton, según un estudio australiano.

En el siglo XX, casi tres millones de cetáceos fueron arponeados por humanos, según cifras de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), y varias especies quedaron amenazadas.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *