Recientemente, Starbucks anunció la adquisición de otra finca cafetera en Costa Rica, así como en Guatemala. La multinacional estadounidense también confirmó futuras inversiones en fincas en África y Asia. “El aprendizaje en estas fincas busca encontrar soluciones para aumentar la productividad en las fincas, apoyar la rentabilidad para los agricultores y construir resiliencia climática”, dijo la empresa.
Esto marca una expansión de su red de innovación colaborativa del café, conectando aún más a los agricultores de todo el mundo con recursos para proteger el futuro del café. La empresa compra el tres por ciento del café del mundo, obteniendo y tostando solo granos de café Arábica, una variedad conocida por sus sabores ricos y complejos. El cambio climático está impactando la disponibilidad de café de alta calidad en todo el mundo, y las comunidades agrícolas sienten el impacto en la productividad, la calidad de los cultivos y sus medios de vida.
“Nuestra promesa a esos agricultores y sus comunidades es que siempre trabajaremos para garantizar un futuro sostenible del café para todos. Nuestra solución es desarrollar intervenciones en las fincas, compartir semillas, investigación y prácticas en toda la industria para ayudar a los agricultores a mitigar los impactos del cambio climático”, dijo Michelle Burns, vicepresidenta ejecutiva de Café Global y Sostenibilidad de Starbucks.
Las temperaturas crecientes que causan sequías, la enfermedad de la roya del café y otros desafíos climáticos relacionados están impactando la disponibilidad, la calidad y el sabor del café tal como se conoce hoy..
En Hacienda Alsacia, Starbucks está trabajando para mitigar los impactos del cambio climático. La empresa ha creado las mejores prácticas para hacer que el cultivo del café sea más rentable, ha desarrollado la próxima generación de café de calidad resistente a enfermedades y lo ha compartido con agricultores de todo el mundo.
Las nuevas fincas en Costa Rica y Guatemala estudiarán variedades de café híbrido bajo diferentes elevaciones y condiciones de suelo, lo cual es un paso crítico en la investigación de nuevo material genético. La finca en Costa Rica, ubicada junto a Hacienda Alsacia, también estará diseñada para explorar el uso de mecanización, drones y otras tecnologías para ayudar a enfrentar los desafíos de disponibilidad de mano de obra a los que se enfrentan los agricultores en América Latina.
“A través de estas fincas de innovación, desarrollaremos soluciones que no solo mejorarán la productividad y calidad del café, sino que también capacitarán a los agricultores con las herramientas y conocimientos necesarios para prosperar en un mundo cambiantey un clima desafiante”, dijo Roberto Vega, vicepresidente de Café Global, Agronomía, I+D y Sostenibilidad de Starbucks.
