La Isla del Coco se beneficiará con $16 millones del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF) para protección ambiental. Autoridades de Costa Rica, Panamá, Colombia y Ecuador se reunieron esta semana en Costa Rica durante la Cumbre del Océano y anunciaron un paquete de ayuda internacional. Este proyecto tiene como objetivo proteger el Corredor Marino del Pacífico Tropical Oriental (CMAR), que está celebrando su 20 aniversario. CMAR incluye tesoros naturales como la Isla del Coco, Galápagos, Malpelo y Coiba.
El plan, llamado “Más allá del 30×30”, tiene como objetivo garantizar la resiliencia en el Pacífico Tropical Oriental a través del fortalecimiento de la cooperación transfronteriza. Incluye el fortalecimiento de la gobernabilidad y la sostenibilidad de CMAR, la mejora de la gestión del corredor regional, la promoción de la economía azul regional y el fortalecimiento de la comunicación regional, la vigilancia y evaluación, la gestión del conocimiento y las actividades de aprendizaje.
Los recursos serán administrados por Conservation International y ejecutados por la Fundación Pacífico. Durante su discurso en la Cumbre el viernes, el Presidente Rodrigo Chaves anunció el reajuste de los parámetros de gestión de la isla. Dijo que el gobierno había publicado el plan de gestión general del Parque Nacional Isla del Coco y estaba listo para revelar el Plan de Gestión General del Área Marina del Bicentenario antes de que finalice el año.
“Impulsaremos la investigación científica, nuestras regulaciones de protección y el desarrollo sostenible para proteger mejor la biodiversidad marina en esta área de más de 100,000 km²,” afirmó el Presidente Chaves.
El Ministro de Ambiente (MINAE), Franz Tattenbach, mencionó que los fondos del Fondo Azul y el Premio Earthshot otorgado por el Reino Unido se concentrarán en la isla. Tattenbach también señaló que se han implementado controles utilizando tecnología de balizas, lo que ha reducido la entrada ilegal en aguas protegidas.
En el marco de la cumbre, también se envió al Congreso la Convención de las Naciones Unidas sobre Regulaciones en la Alta Mar. Esta convención internacional, firmada en 2023 después de casi 20 años de negociaciones, aborda la sostenibilidad de la diversidad biológica marina ubicada más allá de la jurisdicción nacional.
Según el Ministro Tattenbach y el Presidente Chaves, la adopción de este acuerdo representa un hito significativo en los esfuerzos por salvar el océano.
