El gobierno de Estados Unidos anunció el martes que intensificará su lucha contra la trata de personas en la inhóspita selva del Darién, entre Colombia y Panamá, una de las rutas utilizadas por los migrantes que intentan llegar al país norteamericano.
Los Departamentos de Justicia e Interior de Estados Unidos informaron que extenderán una unidad especializada en combatir la trata de personas, creada en 2021 y que ha operado en Honduras, Guatemala, El Salvador y México, a esta extensa jungla, que abarca 266 km de longitud y 575,000 hectáreas.
“Con el anuncio de hoy, estamos ampliando nuestros esfuerzos policiales hacia el Darién, uno de los cruces de migrantes más peligrosos del mundo, y desplegando programas de recompensa como los que han derribado a capos de la droga para perseguir a los traficantes”, dijo la vicefiscal general de Estados Unidos, Lisa Monaco, en un comunicado. “A aquellos que trafican personas a través del Darién, sepan esto: el gobierno de Estados Unidos va tras ustedes”, añadió.
Al mismo tiempo, el Departamento de Estado anunció que ofrecerá hasta 8 millones de dólares por cualquier información que conduzca a la captura de traficantes en el Darién, particularmente los líderes de la organización narco Clan del Golfo.
Selva Inhóspita
El Darién, un denso cuello de botella selvático en la frontera entre Colombia y Panamá, se ha convertido en los últimos años en un corredor para migrantes de América del Sur que intentan llegar a Estados Unidos a través de Centroamérica y México.
En 2023, más de 520,000 personas cruzaron esa región, a pesar de enfrentar peligros como animales salvajes, ríos de fuerte corriente y pandillas criminales que roban, violan y asesinan a los migrantes.
Hasta mayo pasado, más de 150,000 migrantes habían cruzado esta ruta en 2024, según las autoridades de inmigración panameñas. La mayoría son venezolanos, junto con haitianos, ecuatorianos y colombianos. También hay asiáticos, principalmente chinos, y africanos.
El presidente electo de Panamá, José Raúl Mulino, que asumirá el cargo el 1 de julio, ha prometido “cerrar” el Darién y deportar a los migrantes que ingresen al país por esa selva, pero se ha descartado la construcción de un muro.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) informó a mediados de mayo que más de 30,000 niños migrantes habían cruzado esta inhóspita selva en los primeros cuatro meses de 2024, un aumento del 40% en comparación con el mismo período del año anterior.
Se estima que alrededor de 2.8 millones de migrantes indocumentados ingresan a Estados Unidos cada año.
En medio de un año electoral en Estados Unidos, la inmigración se ha convertido en un tema clave de la campaña, con el candidato republicano Donald Trump criticando a su rival, el presidente demócrata Joe Biden, por alentar una “invasión” de migrantes.
