Diecisiete personas fueron arrestadas en una serie de redadas coordinadas realizadas por la policía costarricense, luego de una extensa investigación iniciada en 2023 sobre una compleja red de tráfico de migrantes que operaba entre Ecuador y Estados Unidos. Las autoridades llevaron a cabo 18 redadas en San José, Heredia, Alajuela, Los Chiles y la Zona Sur, perturbando significativamente la red criminal.
Según la Dirección General de Migración, los líderes de la organización en Costa Rica, ahora detenidos, estaban a cargo de coordinar y ejecutar el contrabando de migrantes. Otros miembros eran responsables de transferir, albergar y ocultar a los migrantes hasta que salieran del país.
Las operaciones de la red cubrían tierra, mar y aire, describieron las autoridades. El grupo contaba con una estructura logística completa que abarcaba el reclutamiento, alojamiento y movimiento de individuos. Las investigaciones concluyeron que la organización cobraba alrededor de $14,000 por todos sus servicios.
Por el momento, las autoridades informan que hay 101 víctimas de diferentes países, incluyendo Siria, Egipto, México, Colombia, Haití, India, Ecuador, China y Nicaragua.
Costa Rica era una parada obligatoria, y existía un mecanismo para trasladar a las personas de sur a norte. Se presume que las víctimas ingresaban por Panamá y desde allí eran llevadas a Nicaragua.
“Su transporte a la frontera norte fue coordinado, utilizando autobuses públicos que iban a la frontera norte. También utilizaron taxis de servicio público desde Corredores que viajaban a Orotina, donde se transferían a taxis de servicio público en San José, y luego iban a Los Chiles”, señaló la Dirección General de Migración.
La operación fue coordinada con autoridades de EE.UU. y Panamá. Entre los participantes en la extensa operación estuvieron Investigaciones de Seguridad Nacional de EE.UU. (HSI), la Policía Nacional de Panamá y la Fiscalía de Crimen Organizado de Panamá.
Los funcionarios de migración explicaron que esta es la décima operación internacional realizada para combatir a organizaciones criminales dedicadas al contrabando de migrantes. Las autoridades se refirieron a este caso como el “Caso Atlántico”.
