Los buitres parecen tan elegantes al planear en círculos altos en el cielo. A veces se puede avistar a un solitario ejemplar negro con las alas extendidas planas para atrapar las corrientes ascendentes, y a veces una nube de 20 o más de estas enormes aves se recorta contra el cielo. No se detienen; más bien, con unos cuantos aleteos, continúan sus rondas hasta que es hora de descender en busca de alimento.
No lucen tan agradables descansando en un árbol, todo un grupo de ellos con los hombros encorvados y los ojos negros y brillantes mirándote como si estuvieran controlando tu estado de salud. Aún peor es ver a un grupo de buitres reunidos a un costado de la carretera, despedazando la piel y el pelaje de algún animal muerto.
No son aves populares, los buitres son despreciados debido a su asociación con la muerte. Chistes y dibujos animados se burlan de estas grandes aves, retratándolas como si estuvieran esperando a que algún pobre humano cruzando un desierto sucumba. Halcones y halcones peregrinos transmiten imágenes románticas al posarse en los brazos de sus dueños y seguir las órdenes humanas. Águilas y cóndores son las aves nacionales de varios países. En contraste, los buitres están asociados con comer carrona y no mucho más.
Pero no son las aves fétidas que creemos que son. Juegan un papel importante aquí en Costa Rica y en todo el mundo en limpiar nuestras carreteras, pastizales y otras áreas de animales muertos, enfermos y moribundos. Los paisajes y olores que repelen a la mayoría atraen a estos carroñeros alados.
En los vertederos sanitarios, hacen su parte para reducir las montañas de basura que producimos diariamente, una función disfrutada por pocos. Y son más eficientes y estéticos en esta tarea que, por ejemplo, las larvas.
Llamados zopilotes en español, los buitres se encuentran en todo el país, con menos concentración en áreas boscosas de gran altitud. Costa Rica tiene tres especies: el buitre real, el buitre cabecirrojo y el buitre negro.
Los buitres viven aproximadamente de 25 a 30 años en libertad, y hasta 50 en cautiverio. Aunque su alimento principal es carrona, también comen animales pequeños vivos, y su profusión alrededor de los lugares de basura indica que no desdeñan la vegetación pasada de su punto óptimo.
Su aguda vista y sentido del olfato les permiten localizar comida desde sus formaciones de vuelo alto. Aunque son en su mayoría solitarios, se reúnen cuando ven a otros volando en un patrón de alimentación. A veces viven en parejas o en tríos, y no son territoriales. El buitre real tiende a ser más solitario y dominante sobre la comida.
Los buitres no construyen nidos como lo hacen otras aves rapaces. Ponene uno o dos huevos en el suelo en un área protegida, depresión o cueva, reproduciéndose principalmente en la estación seca. Con una envergadura de dos metros, aproximadamente seis pies, estas aves impresionan cuando vuelan.
Verlos planeando o descansando es común en áreas rurales donde su tipo de alimento puede ser más abundante, y porque nadie los corre. También se concentran alrededor de mataderos, realizando la tarea de limpiar los restos.
Los buitres, o zopilotes, quizás no atraigan admiradores ni siquiera entre los observadores de aves, pero por su papel ambiental, merecen nuestro respeto.
